
El portavoz de El PI PROPOSTA PER LES ILLES BALEARS, en el Parlament, Josep Melià, ha defendido la enmienda a la totalidad que la formación ha presentado a la modificación de la ley para la conservación de los espacios de relevancia ambiental.
Melià ha criticado que con estas modificaciones existe una elevada inseguridad jurídica propia de países comunistas y de regímenes que no garantizan los derechos ni las libertades de empresa. «La norma está llena de términos indefinidos, abiertos, que dan un gran poder a la conselleria de Medio Ambiente cuando no le corresponde».
En este sentido, el portavoz ha asegurado que la conselleria, tramitando un instrumento ambiental, puede dejar sin efecto explotaciones económicas en curso con todos los permisos administrativos pertinentes después de años de esfuerzos y gestiones por parte de los propietarios.
En cuanto a la simplificación administrativa el portavoz ha señalado que con los cambios que quiere introducir el ejecutivo, en vez de avanzar hacia una administración «ágil y eficiente» se dificultan los procedimientos y los hace más difíciles.
En cuanto a la participación ciudadana, Melià considera que existe una falta de participación por parte de las entidades económicas. «La Conselleria debe escuchar a todo el mundo no sólo a quienes ustedes les interesa».
Asimismo, el diputado ha indicado que en relación con la evaluación ambiental el Gobierno Armengol se ha hecho un vestido a medida. “Mientras que al común de los mortales se les aplican todos los trámites y procedimientos, el Govern se hace una normativa específica para no tener que aplicar la normativa. Las leyes deben ser iguales para todos”.
Melià ha insistido en que con estas modificaciones la conselleria se apropia de competencias que no le corresponden. “En el fondo lo que quieren hacer es urbanismo, adquieren competencias urbanísticas y territoriales que no le corresponden. Pretenden que los instrumentos ambientales se proclamen como la gran verdad absoluta que pasa por encima de todo”.